Roman Polanski no se encuentra en el Festival Internacional de Cine de Venecia pero su presencia se ha sentido a través de su película «J’accuse” (“An Officer and a Spy»).

Tras mucha angustia por su inclusión en la competencia por el León de Oro, los periodistas en una conferencia de prensa del viernes se concentraron en la película, una historia real sobre la persecución injusta del oficial francés Alfred Dreyfus en 1894, y no en el pasado del director.

Polanski escapó de Estados Unidos después de declararse culpable de tener sexo con una adolescente de 13 años y ha estado fugitivo por más de 40 años.

Aunque siguió haciendo películas con importantes actores y su cinta de 2002 «The Pianist» (“El pianista”) ganó múltiples Oscar, la aceptación de Polanski en Hollywood se ha reducido en la era del movimiento #MeToo contra el acoso y el abuso sexual. El director fue expulsado de la Academia de las Artes y Ciencias Cinematográficas en 2018, después de 50 años de membresía.

«J’accuse” se estrenó el viernes en el Lido de Venecia. El público en la primera función aplaudió entusiasta, al igual que muchos reporteros en la conferencia de prensa cuando los productores y el elenco, incluyendo la actriz Emmanuelle Seigner, quien ha estado casada con Polanski desde 1989, entraron en la sala.

Obviamente ustedes saben que Roman Polanski no está aquí”, dijo el productor Luca Barbareschi en la conferencia. «Responderemos lo que sabemos de la producción, actuación y … dejaremos a un lado la polémica que no es importante”.