Hijos: Amir, 6 años; Naomi, 4 años; Iker, 11 meses

¿Qué sentiste cuando te enteraste que estabas embarazada?

Cuando me enteré que estaba embarazada, sentí una mezcla de emociones. En primer lugar, me sentí muy feliz al saber que estaba creciendo en mí una gran muestra de amor entre mi esposo y yo. Me sentí ansiosa y con un poco de temor al saber que mi vida iba a dar un cambio. Sin duda, ha sido una de las noticias más hermosas y emocionante que he recibido en mi vida.

¿Cómo cambió tu modo de ver la vida desde que te convertiste en madre?

Cuando te conviertes en mamá, te das cuenta de lo importante que eres para tu hijo, de la responsabilidad que genera el querer darle siempre lo mejor para que sea una buena persona, pero, por sobre todo, una persona feliz. Ahora que soy mamá de tres pequeños, siento que me volví una persona más sensible. Mi manera de ver y percibir las cosas cambió, mi corazón se apachurra cuando veo el sufrir de un niño por cualquier motivo. Cambió mi manera de pensar, antes todo lo que hacía era para mí y desde que me convertí en mamá todo lo que hago es pensando en mis hijos. Con esto no quiero decir que abandone mi vida, sino que mis perspectivas cambiaron y que algunas cosas que antes eran prioridad pasaron a segundo plano.

¿Cómo asumes la responsabilidad de educar a un niño?

A mis hijos trato de enseñarles los valores a través del ejemplo, con la base más importante, que es el amor. Educar no es fácil, aunque mis hijos tienen cosas en común, son a la vez muy diferentes en su carácter y en la manera de ver y sentir lo que pasa a su alrededor. Creo que para educar es importante tener un buen diálogo, esa es la gran puerta para conocer sus sentimientos; darles lugar para que ellos se expresen es muy importante, ya que eso ayudará a afirmar nuestro apoyo hacia ellos. En la educación soy una mamá con límites, sé decir no cuando es necesario, pero también soy una mamá amorosa y expresiva, siempre les digo cuánto los amo y lo importante que son para mi vida.

¿Cuál ha sido el mejor consejo de maternidad que has recibido?

“Disfruta mucho de chiquitos a tus hijos, cárgalos, bésalos, duerman juntos las veces que ellos lo necesiten, juega y dedícales el tiempo que más puedas, porque la vida pasa muy rápido y cuando son grandes ya no los podrás disfrutar de la misma manera. “

¿Qué mundo quieres para tus hijos?

Un mundo de respeto, con iguales oportunidades para todos, un mundo con menos contaminación, entre otras cosas. Pero creo que, para eso, antes debo de seguir formando a mis hijos para que ellos sean personas respetuosas y honestas. Todos debemos de poner nuestro granito de arena para así algún día poder ver y disfrutar de un mundo mejor.

¿Cómo distribuyes el tiempo entre tu vida personal y las actividades cotidianas?

Ser mamá de tres pequeñitos no es una tarea fácil. Al principio, pensé que iba a enloquecer, pero me di cuenta que no es así, siempre y cuando me organice con mis responsabilidades y sus actividades. Por las mañanas, cuando los más grandecitos están en el colegio, trato de dedicarme un tiempo, haciendo dos o tres veces a la semana ejercicio, uno que otro día desayuno con amigas, realizo algún trámite y también hago mis tareas de mamá, que es cuidar de mi bebé, realizar la comida y ordenar mi casa. Las tardes se las dedico a mis hijos, cumplimos con las responsabilidades del colegio y los llevo a sus actividades físicas. Por las noches, cuando ya es su hora de dormir, aprovecho ese momento para atender y disfrutar de la compañía de mi esposo.

¿Qué sacrificios has tenido que hacer en tu vida? ¿Cuáles han sido las recompensas?

Estar lejos de mi familia ha sido y es difícil para mí. Separarme de mi país ha tenido también sus recompensas porque aprendí muchas cosas. Una de ellas es que me formé sola como mamá, creo que todo sería, tal vez, más fácil si mi madre estuviera más cerca. Pero, gracias a que eso no sucedió, hoy me siento una mujer fuerte e independiente. Siento como sacrificio el que mis hijos crezcan lejos de sus abuelos, tíos y primos, ya que el tiempo no regresa y, aunque mi familia siempre está muy cerca a través de videollamadas, mi gran deseo es que algún día estemos juntos nuevamente. Pese a eso, hoy considero que nuestra estancia en México, ofrece una mejor calidad de vida para mi familia y mayores oportunidades a futuro.

 

 

FOTOGRAFÍA: As Foto

LOCACIÓN: Hotel Grand Fiesta Americana

MAQUILLAJE Y PEINADO: Isa Cobos