Con 20 años de edad y una amplia trayectoria artística, Karol Sevilla con el tour “Que se pare el mundo” que pisa Puebla en marzo, deja atrás a la pequeña niña que ha conquistado a miles de corazones después de encarnar a Luna Valente en la serie de Disney, “Soy Luna”, y se prepara para seguir creciendo tanto en lo
personal como en lo profesional. Viene a mostrarse tal cual es, al natural, sin guion, ni presión.
¿Cómo te sientes en tu etapa como solista?
Muy feliz. La verdad que el primer tour que hicimos el año pasado para mí fue un descubrimiento. El terminar un proyecto, ir con el personaje con el que obviamente todas las niñas me conocieron, traer el apoyo de Disney con una mega producción, fue increíble. Y cuando empecé con mi tour como Karol Sevilla todo fue un sueño, empezó con un quiero mostrarme tal como soy y supero mis expectativas de una forma tan impresionante que me alocó el cerebro y dije quiero hacer otro, quiero regresar, quiero traer cosas nuevas, que la gente me vuelva a ver, ya no como un personaje, mostrándome tal como soy yo, Karol, porque muchas veces te quedas encerrado en ese personaje y la gente cree que eres igual y no es así, yo soy una persona totalmente diferente, soy tal como soy en las rede sociales de loca, de que se me ocurren millones de cosas torpes, son muy distraída, soy de una energía que no paro nunca y eso es lo que también quiero llevar al escenario, romper las reglas, romper la barrera de la televisión que no podía con el show de “Soy Luna”. Aquí es diferente, no tengo un guion, ni a nadie que me diga qué hacer o qué decir.
¿No te da miedo este destape de tu verdadera personalidad?
Obviamente es un peligro porque es diferente a lo que te vieron en un principio, pero a mí me gusta mucho eso, el romper la barrera, el bajarme del escenario, estar en contacto con la gente. Somos iguales. El tema de la humildad ha estado en mí desde que me empecé a dedicar a esto, mi familia siempre me dice: pon los pies en la tierra, gracias a la gente eres lo que eres y siempre hay que ser agradecidos en la vida. Es un poco complicado. Al salir de Disney uno crece. Yo llegue con 15 años, muy chiquita, ahora ya tengo 20. Tampoco es que soy la grandota. Pero ya no soy la misma chica Disney y llega un momento en que yo también quiero crecer, me quiero mostrar en otro sentido.
¿Te han ofrecido otro proyecto de actuación?
Sí, pero yo no quería abordarlo porque sabía que ya no iba a ser un personaje de una niña de 14 o 15 años, iba a ser un personaje más grande. Llegaron dos propuestas increíbles pero dos mundos totalmente diferentes, retos en el que actoralmente me favorecían muchísimo, me crecían, pero siento que no era el momento todavía de subir un escalón tan grande, sobre todo para la gente que lo ve. Por ejemplo, ahora con la nueva imagen que tengo en mis redes sociales, ha habido críticas y las he tomado bien. Cuando una va a subir una foto a sus redes sociales es porque se siente bien, feliz y bonita. Pero las críticas siempre van a estar. Hubo preguntas de que por qué ya me mostraba más sexy, que por qué ya no era un ejemplo a seguir para los chicos, pero es un tema de crecimiento y yo estaba lista, subiendo un escalón a la vez. La gente que quiera seguir qué lindo, pero la gente que no, está perfecto. Gente nueva viene conociéndome por lo que estoy haciendo ahora.
¿Estás preparando disco?
Sí. Estoy muy feliz, los temas son totalmente diferentes a lo que venía cantando, son historias de mi pasado, de la primera vez que me rompieron el corazón, que mucha gente no sabe de eso, porque no
suelo hablar de mi vida privada, pues si ya de por si no es tan privada, ya queda de ti saber que guardas y que no. Pero siento que todos los adolescentes pasamos por esas etapas de la vida. Serán canciones muy sanas, no hablo de nada como la música que ahorita está de moda. Quiero regresar a ese tema de las canciones sanas que no están ahora en la industria. No hay ahora nadie que le cante a los adolescentes y quiero tomar ese lugar, quiero estar ahí y en el mismo estilo musical, con cosas nuevas y claves en las que escuchen y digan: es Karol Sevilla.
