Especialista en Desarrollo Humano Psicoterapeuta Gestalt en adultos, adolescentes y niños Tanatóloga. Tallerista. Conferencista. Master Reiki. Terapeuta Floral y Cristoloterapeuta

EXPERIENCIA PROFESIONAL:

Co- Fundadora de Grupo Terapéutico “Espacio en Blanco” Co-Fundadora de Osho Apramana Puebla Docente del IHPG Puebla Terapeuta en Ágape

Para la tanatología es considerado duelo cualquier tipo de pérdida, no solamente la muerte de un ser querido, sino cualquier cambio que sucede en la vida de las personas, agarrándolas desprevenidas y desbordándolas. Un duelo puede ser el cambio de empleo, de residencia, una etapa de vida como la maternidad o hasta dejar la soltería para casarte. Claro que, el duelo mayor es la muerte, aunque cada persona vive los duelos de diferente forma y en su tiempo, por ello la importancia de no etiquetarlo. El duelo se elabora, no se supera.

¿CÓMO SE ELABORA UN DUELO?

Se refiere a la construcción de un duelo sano y para poder realizarlo tengo que pasar las diferentes etapas del mismo, así como las emociones que acompañan a este proceso. Un duelo se elabora siempre con una línea ascendente. Debe llegar un momento en el que tú decidas reintegrarte a tu vida, al gozo, a tu rutina. Un luto te invita más que a la vestimenta, al recogimiento. Tienes que darte el permiso y el tiempo para asimilar tu perdida, porque pareciera que, en este tiempo, con la prisa que tenemos para todo, ya ni los duelos los queremos vivir de forma adecuada o natural a lo que llamamos un duelo sano.

¿CUÁLES SON LAS EMOCIONES BÁSICAS EN EL DUELO?

El miedo, la tristeza y el enojo. El enojo aparece porque puede enfadarte que la persona ya no esté contigo, un despido injustificado, con la vida, con Dios, con lo que quieras. El enojo es una emoción natural, es una defensa. La tristeza, obviamente que acompaña al duelo, a veces más intensamente, a veces menos. Pero inhibir la tristeza sería interrumpir un proceso natural donde la persona esta en un estado emocional de lagrimas, reflexión o algo similar, que crea necesario para desahogarse. Hay que observarnos y hay que darnos permiso de vivir.

¿CÓMO ES UN ACOMPAÑAMIENTO TANATOLÓGICO?

Se tiene que abrir un espacio de escucha. Alrededor de la pérdida, existe una negación al dolor, muchas veces se pretende evitarlo y las personas dicen «vamos a echarle ganas». Esto es algo que se prohíbe en la Tanatología, el «echarle ganas». Al doliente no le ayuda en nada esto, así que cuando hacemos el acompañamiento nos dedicamos a escuchar, a que la persona se sienta validada, escuchada y contenida.

¿POR QUÉ ES IMPORTANTE VIVIR UN DUELO?

Es muy importante que el duelo se viva día a día. No se agenden grandes planes y expectativas. En el transcurso del tiempo la persona se irá dando el permiso de elegir estar solo en algún momento, escribir, meditar o llorar. Es muy importante ir poco a poco haciéndonos cargo de nosotros mismos y reconociendo que hay que abrazar las emocione que vamos viviendo. Porque si vivimos sanamente las emociones, fluctúan adecuadamente.

 

 

FOTOS: Antonio Aparicio

POR: Jazuara Salas Solís