Anne Hathaway sufre secuelas tras su interpretación en «Los Miserables»
Desde que la actriz Anne Hathaway se hizo acreedora al Oscar a la Mejor Actriz de Reparto por la cinta «Los Miserables», el mundo entero podría jurar que fue su increíble interpretación de la canción «I Dreamed A Dream» la que logró que se llevara la máxima estatuilla, sin embargo, ciertos detalles fueron los determinantes.
El raparse el cabello, no fue sólo lo que Anne tuvo que hacer para meterse por completo al papel, adelgazar muchos kilos de golpe fue indispensable para hacer creíble su caída en desgracia, hecho que hasta este momento le sigue causando problemas con secuelas en su organismo.
Y aunque la intérprete se libró de la famosa maldición que se llevan muchas ganadoras del galardón dorado, de no volver a encontrar trabajo después de ser distinguidas, sus problemas son aún mayores tras este papel, ya que su salud no está del todo bien.
Y aunque algunos otros compañeros de profesión de Anne como Tom Hanks para su papel en «Philadelphia» o Adrien Brody para «El Pianista» han hecho esto sin ningún problema, lo que la diferencia es que ella no solicitó los servicios de un nutriólogo para bajar de peso.
«Perdí una insana cantidad de kilos en sólo dos semanas. Entonces yo no sabía nada sobre nutrición, por lo que machaqué mi cuerpo. Aunque fue mi cerebro el que se llevó la peor parte, me sentí muy ansiosa y perdida durante bastante tiempo», explicó Hathaway durante una entrevista.
Al mismo tiempo reconoció: «Me ha costado entender que aquella pérdida de peso no fue algo positivo a largo plazo para mi salud. De hecho, me ha costado mucho tiempo volver a sentirme sana. He estado muy enferma muchos años por culpa de lo que hice».
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«Cuando rodamos aquella película acababa de cumplir 30 años. Me acababa de casar. En teoría debería estar feliz, pero la ansiedad y la depresión me lo impedían. Digamos que no me sentía muy cómoda porque no sabía quién era. Y que te pase eso justo cuando más expuesta a los medios está no es algo agradable», confesó.
La actriz es el claro ejemplo que en ocasiones, los artistas llegan a los extremos para lograr una actuación impecable y con la caracterización necesaria para complementar el personaje.