Megan Fox confiesa las razones de no contar su historia a #MeToo
La actriz Megan Fox por fin tiene algo que decir y contar después de que por varios años y tras algunas declaraciones de sus compañeras se ha mantenido callada en cuanto a las injusticias que las mujeres de Hollywood han sufrido por tanto tiempo.
A través de una entrevista realizada al New York Times, la artista mencionó las razones por las que ha tenido miedo de confesar su historia asegurando que teme sufrir consecuencias que además de afectarla a ella, dañen alguien más.
La famosa protagonista de «Transformers» nunca había sido tan cuidadosa en sus palabras, ya que en el 2009 recordó haber hecho una audición para ser extra en «Bad Boys II» de Michael Bay narrando la manera en la que la obligaron a sexualizar su imagen para asegurar el papel.
«Me pusieron en tacones de 15 centímetros y en un biquini de la bandera. Me enviaron a Michael. Él me aprobó. Luego me pusieron en una escena debajo de una cascada. Te daban 500 dólares extra si estabas dispuesta a mojarte y yo estaba emocionada de que me mojaran», contó en aquel entonces.
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Las declaraciones de Megan siempre eran palabras para los tabloides, a lo que aseguró: «Usaban mis palabras y las empleaban en mi contra de una manera realmente dolorosa. No quiero decir esto sobre mí misma. pero digamos que estaba adelantada a mi tiempo y la gente no me entendió. En vez de eso, me rechazaron por características que ahora celebran en otras mujeres que han hablado públicamente. Por mi experiencia, siento que es probable que siempre esté fuera del entendimiento colectivo».
Con respecto al movimiento #MeToo, Fox aseguró tener más de una historia que contar, no obstante, prefiere mantenerse callada a consecuencia del mal trato que ha recibido antes por los medios y por la audiencia en general.
«Basados en cómo me han tratado las personas y las feministas, no creo que sería una víctima empática. Siento que cuando yo cuente mi historia el mundo creerá que es apropiado avergonzar a una víctima», sostuvo.
Al ser cuestionada sobre si le gustaría contar uno de esos relatos en esteos momentos mencionó que: «No soy el mazo universal de la justicia. Esto no significa que otras personas no deberían hacer lo que les parece correcto».
Justo a principios del año, la actriz alegó diciendo que ella considera que Hollywood se encuentra en una «quiebra moral»: «No hay mucha preocupación sobre qué es correcto para un individuo. Mientras sobrevivas durante las grabaciones y ellos obtengas lo que necesitan de ti, realmente no les importa si después te mueres», finalizó.