Los colores forman parte de nuestra vida diaria y es normal que cuando salimos al trabajo, escuela, en una cita, una entrevista de trabajo, en cualquier situación nos hagamos la pregunta ¿Qué me pongo? ¿Qué color debería de usar? y escogamos lo que nos hace sentir cómodas, pero ¿Qué color debemos usar en una entrevista de trabajo?

Lo que muchos de nosotros ignoramos es el impacto y efecto que los colores de nuestra prenda puedan tener a nuestro alrededor, pues el color tiene una gran influencia sobre nuestras decisiones, ya sea que escojamos el color de nuestro cabello, uñas, el carro, incluso el color de nuestra ropa interior, todo genera un impacto.

La psicología del color es muy importante,  pués para una entrevista de trabajo, antes de presentarte verbalmente, tu vestimenta ya habló por ti, por ejemplo, por ningún motivo debes usar son los chillantes, los llamativos, pues estos te harán ver como alguien inmaduro, en cabio los colores como obscuros como el azul marino, el gris o el negro te harán ver mucho más profesional y decidido y ojo, también es importante la actitud que tomes.

No te preocupes, en Los Rostros te diremos o que los colores hablan de nuestra personalidad.

Negro: un color ideal para faldas y pantalones, e incluso para trajes de mujer; en el caso de los hombres, puede quedar un poco fúnebre. Evita el exceso de negro, porque al ser un color elegante y relacionado con la tristeza, no querrás parecer aburrida y triste, asegúrate de incluir un tono que contraste y aporte algo de luz. Los más adecuados son el blanco y la crema.

Azul marino: posiblemente, el color más seguro en el ámbito profesional, ya que sugiere integridad y profesionalidad, y es uno de los más favorecedores para cualquier tono de piel, aunque puede resultar un poco aburrido.

Gris marengo: color muy distinguido. De nuevo, favorece a casi todos los tonos de piel, sobre todo con una falda o un top blancos.

Gris: un gris más claro puede parecer apagado y sugerir un carácter aburrido. Si no tienes un tono de piel un poco bronceado, tampoco realza demasiado.

Amarillo: creativo, enérgico, positivo y alegre. No está tan ligado al pensamiento lógico o estratégico. Utilízalo con moderación: en una corbata, o en una chaqueta o falda en el caso de las mujeres.

Rojo: este tono excita el sistema nervioso, y por eso es el color del amor, ¡pero también el de la ira! El rojo resulta muy dominante, pero es un clásico para las corbatas y las chaquetas de mujer.

Rosa: el color del sexo. Es, además, una opción muy «de chica», el preferido entre las celebridades que practican topless, etcétera. Las camisas rosas de hombre están de moda y dejan de estarlo de manera cíclica y muy rápida. El rosa intenso puede sugerir un deseo de llamar la atención.

Azul: el color de la calma y la empatía. Un buen color para combinar.

Marrón: se considera un tanto aburrido y tradicional, con alusiones a la vida rural. No está muy bien visto en los ambientes urbanos.

Verde: color suave, más accesible, actualmente muy ligado a los temas ambientales. No es el más favorecedor para muchos tonos de piel, ya que puede reflejarse en la cara y provocar un extraño aspecto de mareo.

Naranja: este color se elige para crear un ambiente positivo y alegre en restaurantes y cafeterías, pero para una entrevista de trabajo puede ser arriesgado. El naranja tostado es más seguro que los tonos chillones, que sugieren una mentalidad original y una personalidad extrovertida.

Verde azulado: una buena elección «brillante», ya que tiene suficiente azul para resultar vistoso y serio al mismo tiempo.

Morado: color distinguido, relajante y que suele sentar bien a todo el mundo.

Blanco: limpio, elegante, sin nada que esconder.

Beige: puede sugerir una personalidad sosa, sobre todo si se lleva de pies a cabeza.

Caramelo: un tono algo más intenso que implica más personalidad y confianza que el beige.

Ahora sí, ya sabes que color es ideal para tus proyectos del día y como combinar tu ropa para dar una excelente presentación con solo verte.

Nos vemos con más #ModayEstilo