Las tendencias cambian y, aunque la moda no se cansa de rebuscar en las décadas de los años 60, 70, 80 o 90, hay determinadas prendas y fórmulas que no han envejecido tan bien como otras.

Nadie se libra de arrepentirse, aunque sea un poco, de algún look (o peinado) del pasado, ni la mismísima Victoria Beckham. Así lo ha confesado la ex Spice Girl a The Wall Street Jorunal en una pequeña entrevista en la que reflexiona sobre cómo ha cambiado su estilo durante los últimos 20 años. La diseñadora de moda británica cuenta que sus hijos no dejan de rebuscar en el estilo de su marido y ella cuando comenzaron a salir.

«Hay una foto en la que aparecemos David y yo paseando nuestros perros rottweiler cuando vivíamos en Manchester. Mis hijos adoran esos looks». En la fotografía Victoria aparece luciendo un plumífero plateado, una gorra de béisbol y unas deportivas, un estilismo que incluye todas las prendas que la generación Z adora ahora mismo.

Sin embargo, hay un look concreto del que Victoria afirma arrepentirse: el que lució en 1999 para acudir a una fiesta de Versace en Londres. «Nunca, nunca, jamás, jamás se me permitirá olvidar ese look «, dice Victoria .

La diseñadora de moda acudía con un mono de cuero negro, a juego con su marido. Lo peor del mismo según indica es que ambos fueron vestidos íntegramente de Gucci a un evento de Versace organizado por Donatella, «lo que en sí mismo ya estaba fatal», señala.