Disney nunca barajó otra opción que la de contar con Emma Stone para encarnar a la villana más extravagante y carismática de su catálogo, Cruella de Vil, en la película que repasa la vida del personaje.

«Sinceramente no lo sé, no tengo ni idea, pero obviamente vieron algo maligno y terrible en mí. Y lo agradezco», asegura la actriz al ser interrogada sobre los motivos por los que el estudio la situó como única elección posible.

Después del éxito de «Maléfica», Disney quería seguir explorando los orígenes de sus antagonistas y pensó que, al igual que Warner Bros hizo con «Joker», el personaje de Cruella de Vil disfrutaba de la misma capacidad de generar empatía y rechazo como para rodar un largometraje que analizara su origen.

El resultado es «Cruella», que se estrena este viernes en cines y Disney+, una cinta que repasa la vida de la villana desde que era una niña, mucho antes de que un abrigo de dálmatas se convirtiera en su obsesión.

Stone se ha unido así a la lista de estrellas que en los últimos años han protagonizado cintas que cuentan la versión del malo de la historia: Joaquín Phoenix en «Joker», Angelina Jolie en «Maleficient», Margot Robbie en «Birds of Prey» o Tom Hardy en «Venom».

«Siempre nos ha interesado conocer qué es lo que lleva a una persona a vivir en su lado más oscuro -analiza Stone-. A habitar en esas partes que uno oculta o que llega a pensar pero que resultan demasiado crueles o socialmente inaceptables».