Desde 1962, cuando Sean Connery tomó el papel protagónico de la primera entrega de la inmortal franquicia de las novelas de Ian Fleming Dr. No, las películas de James Bond han entretenido y apasionado a generaciones enteras. Con 24 películas en su espalda, la nueva noticia de la duración de la última película del agente 007 se presenta para romper un nuevo récord. Con sus 2 horas y 43 minutos, No Time To Die llegará para entretenerte durante más tiempo que ninguna otra antes de ella.

Varias cadenas de cines alrededor del mundo como Regal, AMC y Pathe Netherlands, entre otras, han incluido el tiempo de ejecución de No Time to Die a los 163 minutos. Con esta duración, No Time To Die va a superar a la también protagonizada por Craig y dueña del récord, Spectre, que registró 2 horas y 28 minutos. Originalmente surgieron algunos informes no oficiales que sugerían que la película llegaría a las 2 horas y 54 minutos. Pero aunque esto se ha reducido un poco, será garantía que tendremos una película llena de acción.

Por si no quedaba claro que a Daniel Craig le gusta ser protagonista, increíblemente también tiene el récord por la película más corta en la historia de la franquicia. La entrega de 2008 Quantum of Solace cerró con una duración de 1 hora y 47 minutos. Con casi una hora más de duración con respecto a ella, esto no solo significa más  acción, más aventuras, más gadgets y más elegancia británica, sino que también significa una hora más de excelente música de la mano de Hans Zimmer.

No Time to Die se va a centrar en el regreso a la acción de James Bond. A quien vimos por última vez al final de Spectre en un estado de jubilación en Jamaica. Un viejo amigo suyo de la CIA, Felix Leiter, interrumpe su retiro al pedirle su ayuda para rescatar a un científico secuestrado. Pero claro, como es de esperarse, esta terminaría siendo una misión mucho más traicionera de lo esperado. Aquí será donde sus habilidades de super agente tendrán que salir a flote en el rastreo de un nuevo villano. Ese villano, llamado Safin, es interpretado por el ganador del Oscar y estrella de Bohemian Rhapsody, Rami Malek.