La defensa de Harvey Weinstein terminó de presentar su caso el martes en su juicio por violación sin que el acusado testificara, por lo que el siguiente paso serán los argumentos finales en el caso emblemático de la era del #MeToo marcado por testimonios detallados de seis acusadoras.

Como se esperaba, Weinstein decidió no subir al estrado, y evitó el riesgo de que los fiscales lo cuestionaran en interrogatorios. Él confirmó la decisión a la corte tras reunirse a puerta cerrada con sus abogados por media hora mientras la especulación crecía pues no habían descartado que declararía.

Cuando le preguntaron al salir de la corte si había pensado en testificar, Weinstein respondió: “Quería”.

El abogado defensor Arthur Aidala agregó que Weinstein “estaba listo, dispuesto, apto y, de hecho, bastante ansioso por testificar y limpiar su reputación” pero no lo hizo porque sus abogados sentían que los fiscales “fracasaron miserablemente” la demostrar su caso más allá de la duda razonable.

Se espera que se presenten los argumentos finales de la defensa el jueves, seguido de los de la fiscalía el viernes. Las deliberaciones del jurado comenzarían el martes. La corte permanecerá cerrada el miércoles y el lunes por feriados.

Al no testificar, Weinstein siguió el ejemplo de casos prominentes por delitos sexuales, como Bill Cosby, quien no subió al estrado ninguna de las veces que fue enjuiciado por drogar y abusar sexualmente de una mujer en su casa en un suburbio de Filadelfia. Después de que el juicio fuera anulado en 2017, el comediante fue declarado culpable en un segundo juicio.

Weinstein, de 67 años, está acusado de violar a una mujer en un hotel de Manhattan en 2013 y practicarle sexo oral por la fuerza a otra mujer, la asistente de producción Mimi Haley, en 2006. Otras acusadoras fueron convocadas como testigos como parte de un esfuerzo de la fiscalía para mostrar que Weinstein ha usado las mismas tácticas para victimizar a muchas mujeres a lo largo de los años. El acusado afirma que todas sus relaciones sexuales fueron consensuadas.

Por política The Associated Press no publica los nombres de las personas que afirman haber sufrido abuso sexual a menos que denuncien públicamente. El nombre de la mujer que acusa a Weinstein de violación no ha sido revelado porque no está claro si desea ser identificada públicamente.

Después de que el jurado se retiró por el día, los abogados de Weinstein discutieron con la fiscal Joan Illuzzi-Orbon por su plan de mencionar en los argumentos finales que la apariencia física de Weinstein ha cambiado bastante desde que ocurrieron los supuestos ataques.

Wesinten ha llegado con una andadera todos los días, dejándola detrás de la mesa de la defensa. Sus abogados dicen que la necesita por una cirugía reciente de la espalda, pero Illuzzi dijo que parecía más como un objeto de utilería para congraciarse con el jurado.

¡No es de utilería, basta!, dijo el abogado de Weinstein Damon Cheronis.

“Usted puede gritar todo lo que quiera”, dijo Illuzzi. “No tenían que tener la andadera aquí”.

Después de más discusión, el juez James Burke dijo que estaba bien que Illuzzi mencionara los cambios físicos de Weinstein, pero le advirtió: “No incluya la andadera”.

El caso de la defensa se apoyó principalmente en el testimonio de tres testigos que los abogados de Weinstein presentaron para tratar de crear dudas sobre las versiones de las dos acusadoras principales.

Talita Maia, una ex compañera de piso de la mujer que acusa a Weinstein de violación, dijo al jurado que ella nunca mostró indicaciones de que el productor la estuviese victimizando, de hecho, hablaba bien de él y una vez llamó “su alma gemela espiritual”.

“Parecía que le gustaba mucho como persona”, dijo. “Ella sólo le decía halagos”.

Maia también dio una descripción relajada de cómo la mujer y Weinstein se conocieron en una fiesta de Hollywood unos meses antes de la supuesta violación. Dijo que cuando se dieron cuenta que él era una persona importante en la industria, ella bromeó y dijo “por eso todos son buenos contigo”.

Entonces su compañera de piso fue mas allá y abrazó a Weinstein y “le pinchó las mejillas y dijo ‘no, es porque es muy tierno’”, agregó Maia.

Otro amigo de la mujer testificó el martes que ella parecía “normal” cuando se reunieron para desayunar con el empresario poco después del supuesto abuso en marzo de 2013.

Thomas Richards, un agente de talento en Hollywood, dijo el miércoles que la mujer parecía amigable con Weinstein durante el desayuno y no dijo nada para indicar que acababa de ser violada.

La tercera testigo, la modelo y actriz mexicana Claudia Salinas, repudió el testimonio de la modelo Lauren Marie Young, una de las mujeres convocadas por la fiscalía para apoyar los alegatos de las principales acusadoras.

Al preguntarle sobre las afirmaciones de Young sobre qué Salinas se quedó parada y no hizo nada mientras Weinstein la toqueteaba en un hotel de Beverly Hills en 2013, Salinas respondió que eso “nunca pasó”.

Young había testificado la semana pasada que Salinas cerró la puerta cuando ella y Weinstein entraron al baño, donde afirma que él se quitó la ropa, le tocó el pecho y se masturbó.

Cuando terminó, Young dijo que salió y vio a Salinas parada fuera del baño y la reprendió con la mirada antes de irse tan rápido como pudo.

“Si hubiese hecho eso lo recordaría”, testificó Salinas. “Nunca le cerraría la puerta a nadie”.

El juicio ha avanzado mucho más rápidamente que lo que todos los involucrados esperaban. En un principio a los miembros del jurado les dijeron que podrían escuchar seis semanas de testimonio