El actor Richard Gere visitó el viernes a los migrantes rescatados por un buque humanitario que está varado en el Mediterráneo desde hace más de una semana, llevándoles cajas de fruta y hablando con ellos sobre sus problemas. El encuentro en el mar del astro de Hollywood con los migrantes se produjo en medio de un debate sobre la inmigración que las naciones europeas no han sido capaces de resolver.

 

Gere llevó alimentos y otras provisiones por barco a las 12 personas a bordo del Open Arms, un buque de rescate detenido en aguas internacionales cerca de la isla italiana de Lampedusa y al que le han prohibido el ingreso a los puertos de Italia y Malta. Esas naciones quieren que otros países de la Unión Europea acojan a un mayor número de inmigrantes que cruzan el mar.

El actor de 69 años habló con varios inmigrantes que han huido de Libia en embarcaciones precarias antes de ser rescatados, entre ellos un hombre con su bebé. Gere, quien tiene dos hijos, les mostró fotos de su hijo menor, que nació en febrero.

Gere tiene una larga historia de activismo en pro de los derechos humanos y a menudo realiza campañas en favor del medio ambiente y de la investigación sobre el sida. El actor fue expulsado de China por defender los derechos humanos en el Tíbet.

Gere se encontraba en Italia esta semana y, tras enterarse de las noticias sobre la situación del barco, se puso en contacto con la organización benéfica española Open Arms y le preguntó: «¿Cómo puedo ayudar?», dijo una portavoz del grupo a The Associated Press.

Dos días después, Gere estaba en Lampedusa, ayudando a cargar un barco con provisiones.

Lo más importante para estas personas aquí es poder llegar a un puerto libre, bajar del barco, llegar a tierra y comenzar una nueva vida», dijo Gere, instando al mundo a «por favor, a apoyarnos aquí en Open Arms y ayudar a estas personas, a nuestros hermanos y hermanas».

Lo más importante para estas personas aquí es poder llegar a un puerto libre, bajar del barco, llegar a tierra y comenzar una nueva vida», dijo Gere, quien exhortó al mundo a que “por favor nos apoyen aquí en el Open Arms y ayuden a esta gente, nuestros hermanos y hermanas”.

Otros países europeos aún no han respondido al pedido del grupo humanitario de una solución al impasse.

La Organización Internacional para las Migraciones dice que 39.289 migrantes y refugiados han llegado a Europa por mar en lo que va del año hasta el 4 de agosto, un 34% menos que durante el mismo período en 2018. Dice que otras 840 personas han muerto este año en la peligrosa travesía por el Mediterráneo, desde el norte de África a Europa.