Todo el mundo ha sido un novato cuando se apuntó la primera vez al gimnasio: pesas, muchas máquinas, diferentes opiniones…en fin, confusión total. No es de extrañar, ya que ir a entrenar puede parecer sencillo a priori, pero debes tener en cuenta algunos puntos básicos si eres un advenedizo.

Para empezar, un circuito:

Es de cajón: antes de ponernos a practicar rutinas de entrenamiento más avanzadas, como puede ser la tipo Weider, frecuencia 2, entrenamiento tipo alemán…debes acostumbrar a tus músculos al ejercicio. Es preferible que al principio trabajes todas y cada una de las zonas musculares sin llegar a desgastarlas en exceso, simplemente como una toma de contacto para lo que vendrá más adelante. Dos semanas de circuito, ejercicios sencillos y básicos con poco peso y sufrir las primeras agujetas que tendrás en tu (esperemos) largo recorrido por las salas de pesas.

Comienza con buen pie: domina la técnica:

Este es un principio fundamental, antes de que te pongas a hacer el bruto, como muchos entre los que me incluyo hemos hecho al comenzar a entrenar. Consejo de alguien que lleva ya 10 años de entrenamiento: no te obsesiones por manejar grandes pesos porque veas a otros que lo hacen, ya que o bien quizá ya tengan suficiente experiencia, o simplemente ejecutan mal la técnica y es probable que acaben lesionados. Mira tutoriales de grandes culturistas y entrenadores, aprende a contraer el músculo y a notar cómo lo trabajas, y después ya vendrá lo que tenga que venir.

Ve por el entrenador de la sala:

Sí, sé un pesado: seguramente, sabrá mejor que nadie cómo enseñarte a diseñar tu primer circuito y a mostrarte cómo se ejecutan correctamente los movimientos para dominar la técnica, que es lo más importante para un futuro desarrollo muscular. Si acudes a un gimnasio low-cost en el que no hay nadie pendiente de los novatos, procura hacerte amigo de alguien que tenga experiencia y que no tenga problema en ayudarte. Yo soy el primero que lo haría, porque como os digo, empecé haciendo el bruto y no dominaba la técnica.

No seas impaciente: los resultados llegarán:

Si te has apuntado al gimnasio pensando en ponerte como los modelos o culturistas de las revistas que ves en las fotos, olvídalo. En primer lugar, muchos utilizan sustancias dopantes nada recomendables, y en segundo lugar, para conseguir el físico que sueñas se requiere de muchísimo tiempo y dedicación. No te lo tomes a la tremenda, sé paciente y verás cómo llegan tus objetivos poco a poco.

No hay necesidad de adquirir suplementos desde el principio:

Sí, conozco desde dentro el ‘boom’ que han supuesto las tiendas de suplementación, que ofrecen todo tipo de productos para ponerte más grande, más seco o simplemente más saludable. Desde luego, si comes bien, no son necesarios desde un primer momento. Procura hablar con un experto en nutrición para que revise tu forma física, y si no sabes muy bien qué comer, que te diseñe un plan en tus comienzos. Los suplementos te ayudarán en un futuro, estoy seguro, pero no te obsesiones con ellos desde el principio porque no sabrás ni cómo usarlos.

Cuidado si te ofrecen “cosas para ponerte más grande”:

No es ningún secreto que los culturistas de élite se dopan. El problema es que muchos usuarios que no compiten, posiblemente los llamados “pre playa”, también lo hacen, y muchas veces de forma totalmente inconsciente, sin saber lo que se están metiendo al cuerpo. Si un día te llega algún supuesto “experto” y te trata de vender algún producto para aumentar masa muscular de forma rápida, aléjate de él, porque posiblemente esté tratando de suministrarte esteroides anabólicos, sustancias peligrosas cuando se usan mal.