A menos de una semana de que se conocieran los documentos judiciales en los que Angelina Jolie acusaba a su exmarido, Brad Pitt, de abuso en el marco del juicio que mantienen hace varios años por la tenencia de sus seis hijos, el sitio Page Six se comunicó con una fuente cercana al actor.

“Él ha asumido la responsabilidad de sus acciones y sus problemas pasados: ha dejado de beber y fumar, pero ella nunca ha admitido algún defecto. El matrimonio fue muy apasionado y tóxico a veces y, como todas las parejas, tuvieron peleas, pero también compartieron muchos buenos momentos juntos”, dijo la fuente, quien aseguró que el actor estaba “desconsolado” porque Angelina había decidido tomar ese camino.

 

Además de contar cómo había transitado los últimos días, el allegado a Pitt habló de su batalla contra las adicciones. ”Brad ha hablado de sus problemas con la bebida y las drogas durante el tiempo que estuvieron juntos”. Por otro lado, remarcó que tanto el actor como su equipo legal nunca atacaron a Jolie. “Brad siente que está cada día más aislado de sus hijos y está devastado por eso”, concluyó la fuente quien además dio a entender que tanto él como los abogados sienten que las últimas acusaciones fueron calculadas para influir en la opinión pública antes de que concluya juicio.

 

Jolie y Pitt están legalmente divorciados desde 2019, pero la disputa entre ellos no termina: siguen visitando los tribunales para definir cómo será la custodia de sus hijos. El 12 de marzo, Angelina presentó documentos judiciales en los que indicaba que tanto ella como sus hijos estaban dispuestos a dar testimonio y pruebas de sus acusaciones contra Pitt. Si bien los mismos deberían haber permanecido privados y sellados, fueron filtrados al blog The Blast.

 

Pitt nunca fue arrestado y ni hubo ningún informe policial sobre denuncias de abuso conyugal durante su matrimonio, aunque sí existió un incidente en un avión con su hijo Maddox, del que se conoció casi en el mismo momento en que Angelina anunció la separación.