Los venezolanos Mau y Ricky Montaner lanzan su nuevo disco «Rifresh», que calificaron  como uno de los más trabajados ya que, con el fin de que fuese un refugio para sus seguidores, se desconectaron durante tres meses y terminaron por encontrar una guarida para ellos mismos.

«Empezamos a hacerlo en abril y ya estábamos encerrados. Estábamos haciendo música y uno de los propósitos era que se convirtiera en refugio para la gente, pero mientras lo hacíamos se convertía en refugio para nosotros mismos», relató Mau.

Los hermanos, hijos del también cantante Ricardo Montaner, echan la vista atrás y se dan cuenta de lo afortunados que fueron al poder tomarse tres meses de desconexión creando su disco ya que pasaron los peores meses de la cuarentena haciendo lo que más les gusta.

«Nos encerramos en la casa tres meses, apagamos todos nuestros alrededores y pudimos darnos ese gusto. Lo hicimos casi con esa esperanza y sueño de estar fuera de la casa pasándola bien, así que espero que para la gente sea una distracción bonita», explicó Ricky.

El entorno y la manera de crear el álbum, consideraron, afectó al contenido y lograron crear un disco muy diverso y diferente a los anteriores del que se sienten muy orgullosos.

«Si no hubiésemos hecho el disco así no la hubiéramos pasado bien. Es un disco exactamente como queríamos hacerlo, se arriesga demasiado dentro del mundo en el que estamos, y no puede ser más pop y más comercial», consideró Mau.

Ambos coincidieron en que con «Rifresh» buscaban precisamente refrescar su sonido ante el miedo a la idea de que un fan lo escuche y sienta que es exactamente lo que se esperaba.