Ficha de información:

Tres palabras que te describan: Creativo, empático y sociable

Cumpleaños: 12 de octubre

Estilo de música favorito: Para bailar, salsa; para escuchar mientras trabajo música instrumental clásica

Bebida destilada favorita: Mezcal

Hijos: Renatta, 2 años

 

¿Cuál es la mejor decisión que tomaste como papá?

La mejor decisión que he tomado como padre ha sido el darme la oportunidad de aprender de Renatta, saber que las cosas no son necesariamente como yo lo pienso y que aprender de ella es increíble. Renatta logra eliminar mi estrés y convertirlo en risas, besos y abrazos.

¿Qué tradición familiar aprecias más?

La comida es un momento especial, es el espacio para compartir, aprender y mirarnos a los ojos. Así lo estilábamos en casa de mis padres, y es una tradición o rutina que se ha quedado muy adentro de mí. Además, comer los fines de semana con toda la familia ampliada, es parte de la gran fiesta de amor y respeto que nos tenemos y que me gustaría que Renatta recordara con aprecio.

¿Cuáles son los valores prioritarios que quieres inculcar en tus hijos?

Respeto, disciplina, responsabilidad, libertad, empatía e inclusión.

¿Cómo cuidar de la familia en esta nueva normalidad?

Llevando a cabo de manera rigurosa el distanciamiento físico, pero evitar al máximo el distanciamiento social. Las personas necesitamos de los otros, somos seres sociales y se convierte en necesario evitar aumentar el alejamiento social en el que hemos caído como humanidad y que está provocando una ruptura en el tejido social. Pensar en ti sin dejar de pensar en el otro; cuidar de ti, cuidando a los demás. Hablar suficiente del tema es importante, pero identificar la información veraz es fundamental.

¿Qué es lo que mejor recuerdas de tu padre?

Recuerdo el día que mi papá logró que mi hermano y yo tocáramos las nubes, no fue fácil, primero sacó unos polines viejos que tenía en la bodega y los medio lijamos, después cortamos otro trozo de madera con lo que hicimos unos posa pies y una agarraderas, inmediatamente después construimos los zancos más perfectos que un niño se podía imaginar. Mi hermano y yo subimos en ellos, jugamos, nos caímos, volvimos a subir, nos cansamos y logramos por primera vez tocar las nubes de lo alto que éramos.