Hay que entender que este tiempo de contingencia no es tiempo vacacional y ni siquiera hay que ir a la población de origen. En Puebla hay mucha gente que tiene a sus padres y a su familia en el interior del estado o en otros sitios del país. La recomendación es que no se muevan, que no se vayan, porque es un riesgo para la población que visitan.
La mayor responsabilidad para aplanar la curva de contagios por Covid-19 está en la sociedad civil. Deben entender que hay que salir lo menos posible y atender todas las recomendaciones emitidas por el gobierno federal y estatal para que dada la fase tres, sea lo menos compleja, lo menos catastrófica posible. Se entiende muy bien el gran problema económico que esto significa y que esto va a significar más adelante, pero lo más importante ahorita es priorizar la salud de todos, porque las demás enfermedades no están en tregua mientras hay presencia de coronavirus.
1 ¿Cuál es su postura como profesional de la medicina ante el Covid-19?
Estamos viviendo una de la crisis de salud más importante de la historia de los últimos 100 años de la humanidad. Es un problema muy serio e independientemente de las recomendaciones de las autoridades federales y estatales, si la sociedad civil no acata las indicaciones, nos vamos a meter en un problema mayor como ya sucedió en otros países. Los dos ejemplos típicos son España e Italia, aparte de donde empezó todo, que fue en China, porque lo que ha pasado en España e Italia, rebasó con mucho lo que pasó en China. Los sistemas de salud se vieron rebasados.
2 ¿Cuál es su recomendación?
Mi recomendación es seguir todas las instrucciones, las más importantes de ellas es el distanciamiento social y el lavado de manos. Son dos cosas que debemos hacer todos los miembros de las familias tanto de Puebla como de México. Quedarnos en casa el mayor tiempo posible, salir lo menos que se pueda y sólo bajo condiciones estrictas de trabajo, hacer el súper en horarios donde esté el mínimo número de personas, o muy temprano o ya de noche. Y en los centros comerciales siempre tener la distancia indicada de metro y medio entre personas.
Sobre la medida de usar cubrebocas que ha sido algo muy controvertido en el mundo, algunas organizaciones de salud dicen que no tiene mayor sentido a no ser que sea el N95, sin embargo, mi recomendación es que si no puedes conseguir una mascarilla N95 te fabriques una en casa o compres una de tela, o bien un cubrebocas de cualquier tipo, de algo te puede ayudar y lo más importante es que en algo podrás estar contribuyendo para tratar de diseminar el problema.
Cuando el virus ya está en la comunidad, de alguna manera todos estamos en riesgo y no en riesgo porque simplemente con salir a la calle y respirar sea suficiente para adquirir la enfermedad. Para adquirir la enfermedad necesitas que a tu alrededor haya un aerosol de virus en ese momento y para que eso exista algún portador del virus debió toser o estornudar cerca de ti. Si esto no es así, no hay manera de que uno pueda contraer la enfermedad, por eso es muy importante es distanciamiento social.
El lavado de manos es fundamental. Todos los virus, incluyendo este, tienen una capa proteica, una membrana de proteínas y esa membrana de proteínas se destruye con el detergente, así que es imprescindible que usemos el lavado de manos en la casa, en el trabajo, que con mucha frecuencia nos estemos lavando las manos o usando un gel antibacteriano. Procurar lo menos posible llevarnos las manos a la nariz, ojos o boca, que son la vía de entrada del virus. Si tenemos este tipo de cuidados el daño a nuestra población será menor.
Lo vamos a padecer, de eso no hay duda. Las siguientes dos semanas van a ser determinantes del futuro de esa enfermedad en este país. No hay una vacuna aun y no tengo duda de llegue, pero eso no será en un corto plazo.
3 En términos reales ¿Cuáles son las diferencias del sistema de salud en México en comparación con los países mencionados?
No contamos con el suficiente número de camas de terapia intensiva. No tengo duda de que las terapias intensivas de los hospitales tanto públicos como privados tengan el equipamiento necesario. Hay ventiladores, lo que no van a haber son el suficiente número de ventiladores para el número de enfermos, ahí radica el gran problema. Si nosotros no contenemos esto en las siguientes dos semanas, empezaremos a tener un gran problema en todos los hospitales.
La primera razón es porque el coronavirus va abarrotar a los hospitales, la segunda es qué pasa con los otros pacientes, con las otras enfermedades, es decir, si en esta contingencia todas las demás enfermedades entraran en tregua, bueno. Pero sigue habiendo pacientes con infartos, con traumatismos graves, con perforaciones intestinales graves que van a requerir también una terapia intensiva.
Esto por supuesto puede colapsar el sistema de salud, no solamente desde el punto de vista de la capacidad física, también de la capacidad económica porque no va a haber bolsillo de ningún gobierno que aguante un embate tan grave de enfermos que requieran al mismo tiempo ventiladores de terapia intensiva.