La cantante Rihanna, sorprendió a sus fans al posar de una forma inusual para la portada de la revista británica Vogue.
Rihanna fue elegida para posar en la edición de septiembre y optó por delinearse las cejas, mismo que le ha convertido en blanco de burlas.
En las fotos se puede ver a la interprete de “Work” con un par de líneas a la altura de las cejas y en la cabeza tiene un arreglo floral, como una especie de corona.
En la segunda postal se optó nuevamente por un arreglo floral sobre su cabeza, mismo make up y un vestido negro voluminoso que tiene tres enormes rosas en el hombro.
Para la tercera y última foto también se incluyó el estilo de flores, pero esta vez lució un vestido palo rosa, mientras que los pantis, guantes y chaqueta son de color negro.
El encargado de tomar las fotos, fue el artista Nick Knight, fotógrafo encargado de retratar a Rihanna, nos muestra una nueva versión de la cantante más popular de la última década.