En el restaurante Tierra y Cielo se presenta la obra del maestro Marco Lamoyi y la colección de joyería de Arturo Cáceres, de esta manera se une arte, gastronomía y diseño, para lograr una alianza entre talentos de Chiapas y Tabasco. La intención es crear una sinergia cultural y promover actividades de cultura y gastronomía en el sureste de nuestro país.
Marta Zepeda es una de las más activas promotoras y difusoras de la cocina mexicana, y en particular de su estado natal, Chiapas. Estudió en el Centro de Estudios Superiores de San Ángel (CESSA), de la Ciudad de México y en 2007 abre Tierra y Cielo para hacer realidad su proyecto de Tesis donde desarrolla la propuesta culinaria que ha definido como “Cocina Regional de Chiapas”.
Marco Lamoyi es un creador experimental. Eso es uno de los valores más importantes en el arte llamado cutting edge, al que indudablemente pertenece y del que es precursor, rechazando esta nueva manera de crear que está saturada por la necesidad de manejar un producto reconocible – el arte por franquicia -, típica de una personalidad con trayectoria y que se contrapone precisamente a la idea de cambio, de filo de navaja que es el cutting edge; hay que entender que éste, sin embargo, no es el arte del siglo XXI, sino la transición filosófica y sobre todo mental que el hombre se ha impuesto a través de la idea – contra natura – de tiempo.
Arturo Cáceres es un diseñador de origen chiapaneco apasionado por la plata, se ha convertido en uno de los mayores exponentes de la joyería “folk chic” derivada de las usanzas indígenas y las joyas antiguas. Al combinar felicidad y frescura, Arturo plasma día a día, a través de sus innovadoras piezas, los ardientes momentos, sentimientos y exotismo que la vida posee.